León, Gto.— Una tarde tranquila de sábado en la ciudad de León se transformó en una escena de película de acción cuando, alrededor de las 4:00 p.m., se recibió un reporte al 911: un hombre había robado una camioneta blanca en el estacionamiento del centro comercial Centro Max.
De inmediato, el incidente activó los protocolos de emergencia. Desde el C4, operadores comenzaron a seguir al vehículo a través del sistema de videovigilancia. El ladrón tomó rumbo por el bulevar Torres Landa, pero la policía ya estaba tras él. Al darse cuenta de que lo estaban alcanzando, el sujeto aceleró, desatando una persecución a alta velocidad.
Al llegar al cruce de Torres Landa e Independencia, y al ver que las patrullas intentaban cerrarle el paso, el hombre giró bruscamente hacia la colonia Tierra Blanca. Lo que ocurrió después pudo haber terminado en tragedia.
En la calle Río Lerma, el conductor embistió a un niño que se encontraba cerca de la vialidad. Milagrosamente, el menor no sufrió lesiones de gravedad. Testigos afirman que fue cuestión de centímetros y suerte que no ocurriera lo peor.
La huida continuó hasta que, en la calle Río Balsas, la estrategia coordinada de los oficiales dio resultado. Mientras algunas patrullas lo seguían, otras se acercaban de frente. Sin salida, el sujeto perdió el control y se estrelló contra una camioneta roja estacionada. Los propietarios del vehículo, originarios de Silao, Guanajuato, se llevaron un gran susto al salir y no ver si vehículo.
El sujeto fue detenido en el lugar y trasladado por los elementos de seguridad para su puesta a disposición de la autoridad correspondiente. La rápida acción policial evitó una tragedia mayor y puso fin a una persecución que puso en vilo a vecinos y conductores de la zona.
Las autoridades han señalado que se dará seguimiento a los daños ocasionados y se brindará atención a las personas afectadas, en especial al menor atropellado.
